LENGUAJE NO VERBAL EN JUICIOS: 10 GESTOS QUE PUEDEN HUNDIR (O SALVAR) TU CASO

Escrito por MARKETING

abril 13, 2025

Durante un juicio, el juez escucha, el abogado habla, la parte contraria observa… y mientras todo esto sucede, el cuerpo del abogado —y el de su cliente— también está hablando. Pero no en voz alta. Habla en forma de microgestos, posturas, miradas, silencios, movimientos aparentemente insignificantes.

Y lo más importante: todo eso se interpreta. A veces con precisión. A veces con prejuicio. Pero se interpreta.

En mis más de 25 años en sala, te puedo decir algo con certeza: he visto casos torcerse solo por un gesto mal colocado. Y también he visto cómo una postura firme, una mirada limpia y una pausa bien ejecutada… salvaron una estrategia entera.

Así que no, esto no es un detalle menor.
El lenguaje no verbal es parte de tu toga. Es parte de tu defensa.
Y el abogado que no lo entrena, está dejando que su cuerpo actúe como testigo hostil.

¿Por qué importa el lenguaje corporal en juicio?

Porque el juicio no es solo un proceso lógico, es también un proceso humano.
Los jueces también perciben emociones. Evalúan credibilidad. Detectan contradicciones no solo por lo que se dice, sino por cómo se dice.

Un testigo que evita mirar a los ojos del juez puede parecer inseguro.
Un abogado que se balancea al hablar parece nervioso.
Una parte que cruza los brazos en sala mientras declara puede parecer a la defensiva.

No se trata de que el juez te lea la mente… pero sí de que tu cuerpo no diga lo contrario a tus palabras.

1. Evitar el contacto visual

Uno de los errores más frecuentes y más peligrosos. Cuando alguien no mantiene la mirada, el cerebro del observador —en este caso, el juez o tribunal— lo interpreta como evasión, miedo, deshonestidad.

En juicio, esto afecta tanto al abogado como al cliente o testigo.
Solución: Entrena una mirada firme, pero no desafiante. Mira al juez mientras hablas, alterna contacto visual con el abogado contrario, y regresa la mirada a tu interlocutor. Eso comunica control y honestidad.

2. Cruzar los brazos o las piernas

Postura clásica de cierre. Se percibe como actitud defensiva, pasiva, incluso de rechazo.
Si el juez te está haciendo una pregunta y tú te cruzas de brazos, sin darte cuenta estás cerrando también tu actitud mental.
Solución: Mantén una postura abierta. Brazos a los lados, manos visibles. Si estás sentado, mantén los pies firmes y descruzados.

3. Tocarse la cara, el cuello o la nariz

Este gesto, aunque sea inconsciente, está científicamente vinculado al estrés y a la mentira. El clásico “rascarse la nariz” o “tocarse el mentón” al hablar transmite inquietud.
Y en juicio… eso puede ser letal.

Ejemplo real: una cliente mía, en una audiencia por guarda y custodia, se tocaba el pelo compulsivamente al responder. El juez, visiblemente incómodo, le pidió que por favor no lo hiciera. A partir de ahí, perdió credibilidad.

Solución: ensaya con vídeo tu declaración. Repite hasta eliminar tics nerviosos. Sustituye gestos repetitivos por movimientos suaves y conscientes.

4. Gesticular de forma agresiva

Señalar con el dedo, levantar los brazos, golpear la mesa… puede que estés defendiendo tu argumento con pasión, pero el mensaje que llega es de agresividad. Y eso rompe la neutralidad exigida en sala.

Solución: Usa tus manos para reforzar lo que dices, no para invadir. Gesticula desde el pecho, no desde los hombros.

5. Postura encorvada o exageradamente rígida

Una mala postura comunica inseguridad o tensión. Si estás demasiado inclinado hacia delante, pareces nervioso. Si estás como un palo, pareces forzado.

Solución: espalda recta, pero relajada. Proyecta tu cuerpo como si estuvieras cómodo, sin caer en la dejadez.

6. Moverse en exceso o balancearse

En juicio, el movimiento descontrolado es signo de ansiedad.
Ese ir y venir, o girar sobre los talones, o dar pasos innecesarios, distrae, incomoda y resta autoridad.

Solución: planta bien los pies. Respira antes de hablar. Si necesitas moverte, hazlo con propósito (por ejemplo, para entregar un documento).

7. Parpadear demasiado rápido o fijar demasiado la vista

El exceso de parpadeo denota estrés. Pero mirar fijamente sin parpadear resulta hostil o raro.
El equilibrio es la clave.

Solución: mantén la mirada activa. Parpadea normalmente. No sostengas la mirada más de lo que sería una conversación natural.

8. Voz débil, entrecortada o monótona

No es un gesto visual, pero es 100% lenguaje no verbal. La forma en que proyectas la voz define cómo te perciben.

Una voz baja o entrecortada comunica inseguridad.
Una voz monocorde, aburrimiento o falta de interés.
Una voz demasiado alta… agresividad.

Solución: entrena tu voz. Respira con diafragma. Usa pausas. Proyecta con intención.

9. Reír o sonreír en momentos inadecuados

A veces, los nervios nos traicionan y nos hacen sonreír cuando no corresponde. Y en juicio, esto puede interpretarse como falta de respeto o cinismo.

Solución: mantén una expresión neutral, amable pero profesional. Una ligera sonrisa al empezar una intervención puede suavizar la tensión, pero debe ser contenida.

10. Microexpresiones contradictorias

Las microexpresiones son esos gestos involuntarios que duran menos de medio segundo: una ceja que se arquea, una mueca que escapa, un gesto de desprecio.

Los jueces entrenados en percepción los detectan. Los fiscales también.
Y si tu rostro no acompaña lo que dices, la credibilidad se resiente.

Solución: autoconciencia. Graba tus ensayos. Trabaja con un coach si puedes. Aprende a neutralizar expresiones conflictivas sin parecer falso.

 

¿Cómo se entrena el lenguaje no verbal?

Igual que la oratoria o la estrategia jurídica: con práctica, análisis y constancia.

Aquí algunas herramientas que yo recomiendo a mis alumnos y compañeros de despacho:

  • Grábate en vídeo simulando una audiencia. Obsérvate. Haz anotaciones.
  • Ensaya con alguien de confianza. Pídele que te diga qué transmite tu cuerpo.
  • Haz teatro. Sí, así como suena. Yo mismo estuve en un grupo amateur: aprendí más sobre presencia escénica que en 10 años de universidad.
  • Haz coaching con profesionales en expresión corporal o neurocomunicación.
  • Lee libros de lenguaje corporal. Recomendación top: “La comunicación no verbal” de Flora Davis.

 

¿Y esto tiene base legal?

Sí, aunque indirecta.
El derecho de defensa (art. 24 CE) implica que la parte pueda expresarse libremente y con plenitud. La forma en que se transmite el mensaje influye en el juicio de credibilidad. Así lo reconocen numerosas resoluciones judiciales.

La STS 269/2014, por ejemplo, señala que la valoración de la prueba no solo se basa en lo dicho, sino también en la actitud, coherencia y forma de declarar de los testigos y partes.
Es decir: el lenguaje no verbal es parte de la prueba.

 

¿Qué pasa si tu cliente tiene gestos que lo perjudican?

Aquí el papel del abogado es crucial.
Tu deber no es solo preparar la estrategia procesal, sino también a la persona que la representa.

Consejos:

  • Ensaya con tu cliente su declaración.
  • Grábale y hazle ver sus errores sin juicio.
  • Explícale por qué un gesto puede costarle la custodia, la indemnización o la absolución.
  • Si es necesario, sugiérele técnicas de relajación o apoyo profesional.

Así:  tu cuerpo también es tu alegato

Como abogado, eres un comunicador.
Y en sala, no solo hablas con la ley. Hablas con todo tu cuerpo.

Cada mirada, cada gesto, cada silencio… cuenta.
No los dejes al azar.

Entrena tu lenguaje corporal con el mismo rigor con el que preparas tus argumentos.
Porque a veces, la diferencia entre ganar y perder no está en el artículo 1902…
sino en ese parpadeo mal entendido, en ese cruce de brazos, en esa mirada que no diste.

«

“El cuerpo grita lo que la boca calla.”
Proverbio popular adaptado al derecho procesal… y a la sala de vistas.

Artículos relacionados

LAS 7 HABILIDADES BLANDAS QUE TODO ABOGADO NECESITA PARA DESTACAR EN 2025

LAS 7 HABILIDADES BLANDAS QUE TODO ABOGADO NECESITA PARA DESTACAR EN 2025

En un mundo hiperconectado, automatizado y cada vez más humano (aunque suene paradójico), el éxito en la abogacía ya no se mide solo por cuántas sentencias has ganado o cuántos artículos dominas del Código Civil. En 2025, el abogado que destaque será aquel que sepa...

Alimentación ideal para potenciar el rendimiento de los abogados

Alimentación ideal para potenciar el rendimiento de los abogados

Alimentación ideal para potenciar el rendimiento de los abogados Los abogados se enfrentan a exigentes jornadas laborales, con horas extras, abundante información que procesar y situaciones estresantes constantemente. Su profesión demanda un alto rendimiento mental...

Share This

Compártelo

Comparte con tus amigos